
Schefflera
Plantas aromáticas, orquídeas, bonsáis, cactus, frutales, plantas de interior y exterior.
Sería interesante el pulverizar con agua tibia las hojas evitando las flores (se pudren), sobre todo en habitaciones que tengan calefacción (aire seco). Una alternativa a tener que estar pulverizando con frecuencia es poner la maceta sobre en un cuenco con guijarros húmedos que proporciona aire húmedo a su alrededor.
Esta original planta fue descubierta en Colombia, aunque es originaria de las zonas tropicales y subtropicales de América del Sur.
Hay que ubicarla en lugar muy luminoso, pero sin que reciba la luz del sol directamente.
La humedad ambiente debe ser alta. Para conseguir esto puede pulverizar con agua y también puede colocarla sobre un plato con guijarros mojados, evitando que el fondo de la maceta esté en contacto con el agua, para que no se pudran las raíces. El agua con la que pulverices que no esté fría, sino tibia (podría amarillear las hojas) y que sea blanda, con poca cal.
No la coloque cerca de una corriente de aire, ni cerca de la calefacción, puede resecarse y dejar de florecer e incluso provocar la muerte de nuestro Anthurium. También podría perder las hojas por culpa de las corrientes de aire.
En Verano riega unas 2 veces a la semana pero en invierno reduce a 1 vez por semana. Es casi mas importante la humedad del aire que el riego.
Abona 1 vez cada 15 días con un fertilizante líquido durante primavera y verano (mejor que sea uno indicado para plantas de flor).
Trasplante a una maceta un poco mayor cada 2 años, preferiblemente en primavera. No es un planta que crezca mucho, y que tenga necesidad de tener mucho espacio, por eso no hay que trasplantar todos los años.
El Anthurium puede ser reproducido por semilla o multiplicado por división de matas, esto solo puede hacerse con plantas adultas.
Es conveniente limpiar el polvo que se acumula en las hojas con un paño húmedo, ya que entorpece la captación de luz y el intercambio gaseoso.
Si las hojas tienen un aspecto áspero y seco, no florece y las hojas se vuelven marrones, se podría deber a que el aire a su alrededor es muy seco. Pulverizar con agua o coloque la maceta sobre un recipiente con guijarros y agua para aumentar la humedad ambiente a su alrededor.
Cuando las hojas se ponen amarillas, debe colocarla en un sitio más cálido, puede ser que haya cogido frío, esto puede ocurrir sobre todo en invierno. Hasta que se recupere, no la riegue.
O sea, que es conveniente airear diariamente el emplazamiento, pero eso sí, evitando las corrientes de aire frío que provocan la caída de los capullos.
La frecuencia del riego dependerá, a parte de la especie de orquídea, de muchos otros factores como el tipo de sustrato, la temperatura, la luz, la ventilación, etc. Por ejemplo, cuanta más luz y mayor temperatura, mayor riego.
Es muy importante, no regar con agua que tenga exceso de sales o cal. El cloro que se utiliza para purificar el agua de consumo, en principio no les perjudica.
Existen en el mercado abonos específicos para orquídeas que dan muy buenos resultados, aunque también podemos utilizar algún tipo de abono universal que ya utilicemos para el resto de nuestras plantas, aunque en la mitad de la dosis que nos indique el fabricante del abono. El exceso de abono podría estropear, e incluso matar nuestras orquídeas.
El sustrato a los 2 ó 3 años pierde sus cualidades, se compacta reteniendo demasiada agua y acumulando sales de los fertilizantes. Si el riego y el abonado han sido altos, se deteriora en sólo 1 año. Así que, hay que lo ideal es renovarlo haciendo un trasplante cada 1 ó 2 años.
Los sustratos de orquídeas, suelen ser una mezcla formada por cortezas trituradas con musgo en una proporción del 70% y 30% respectivamente. En el mercado se encuentran sustratos preparados para orquídeas.De manera ocasional, la planta puede perder sus hojas, es algo normal en la planta.