lunes, 27 de junio de 2011

Schefflera.














Schefflera








La Schefflera es una de las plantas de interior más populares. Pertenece a la familia de las Araliáceas y es originaria de las zonas tropicales de Taiwan, Nueva Zelanda y Asia sur oriental. Algunas variedades llegan a alcanzar varios metros de altura.

Se recomienda que su ubicación sea dentro de casa en un lugar muy luminoso, a ser posible cerca de una ventana, aunque también se puede colocar en el exterior pero evitando el sol directo. Si observamos que las hojas de la parte de abajo se caen, y están pálidas, se puede deber a la falta de luz o de abono.

No es una planta a la que le guste el riego excesivo, y su peor enemigo esta en el encharcamiento. Si observa que se le caen las hojas y ve el tronco de color negro, es que nuestra planta tiene exceso de agua. A pesar de que se debe evitar el exceso de agua, si debemos rociar el follaje de vez en cuando, pues la Schefflera es una planta que necesita humedad ambiental. También servirá para lavar las hojas.
Crece mucho y puede llegar hasta el techo, a menos que la despuntes para obtener una forma más redondeada y densa en lugar de larguirucha.
Si se queda pelada por la base, puede podarla para que emita nuevos brotes o plantar al pie otra Scheflera pequeña que rellene el hueco de vegetación.

Si observamos que nuestra Schefflera tiene las hojas pálidas se debe a que tiene falta de abono o de luz. Si vemos que las hojas parecen “quemadas”, es bastante probable que tenga exceso de fertilizante.
El abonado puede ser con algún abono universal, pero le ira mejor el "abono de plantas verdes". Para su trasplante podemos utilizar cualquier sustrato universal.

Spathiphyllum.














Spathiphyllum








De nombre casi impronunciable, el Spathiphyllum es una planta de interior que no requiere de muchos cuidado. Es ideal para principiantes, ya que es muy sencilla de mantener.
Se adapta bien a los lugares donde no hay mucha luz, pero para favorecer su floración, es mejor colocarlo en un lugar muy luminoso, pero nunca directamente al sol.
No le gusta una ubicación donde existan corrientes de aire, ni los cambios bruscos de temperatura.

Sería interesante el pulverizar con agua tibia las hojas evitando las flores (se pudren), sobre todo en habitaciones que tengan calefacción (aire seco). Una alternativa a tener que estar pulverizando con frecuencia es poner la maceta sobre en un cuenco con guijarros húmedos que proporciona aire húmedo a su alrededor.

En la época de crecimiento y floración, se debe regar 2 veces en semana, pero en invierno deja que pase un poco de sed espaciando el riego y dejando incluso que se llegue a poner lacia, con las hojas "flojitas".

Es recomendable el abonado cada 20 días. Cuidado con el exceso de abono, pues se queman los bordes de las hojas. Es muy importante no olvidarnos del abonado, ya que nos ayudará a que nos de unas
flores preciosas y a que nuestra planta esté vigorosa.

Anthurium.












Anthurium.



Esta original planta fue descubierta en Colombia, aunque es originaria de las zonas tropicales y subtropicales de América del Sur.


Hay que ubicarla en lugar muy luminoso, pero sin que reciba la luz del sol directamente.


La humedad ambiente debe ser alta. Para conseguir esto puede pulverizar con agua y también puede colocarla sobre un plato con guijarros mojados, evitando que el fondo de la maceta esté en contacto con el agua, para que no se pudran las raíces. El agua con la que pulverices que no esté fría, sino tibia (podría amarillear las hojas) y que sea blanda, con poca cal.

No la coloque cerca de una corriente de aire, ni cerca de la calefacción, puede resecarse y dejar de florecer e incluso provocar la muerte de nuestro Anthurium. También podría perder las hojas por culpa de las corrientes de aire.


En Verano riega unas 2 veces a la semana pero en invierno reduce a 1 vez por semana. Es casi mas importante la humedad del aire que el riego.


Abona 1 vez cada 15 días con un fertilizante líquido durante primavera y verano (mejor que sea uno indicado para plantas de flor).

Trasplante a una maceta un poco mayor cada 2 años, preferiblemente en primavera. No es un planta que crezca mucho, y que tenga necesidad de tener mucho espacio, por eso no hay que trasplantar todos los años.


El Anthurium puede ser reproducido por semilla o multiplicado por división de matas, esto solo puede hacerse con plantas adultas.

Es conveniente limpiar el polvo que se acumula en las hojas con un paño húmedo, ya que entorpece la captación de luz y el intercambio gaseoso.


Si las hojas tienen un aspecto áspero y seco, no florece y las hojas se vuelven marrones, se podría deber a que el aire a su alrededor es muy seco. Pulverizar con agua o coloque la maceta sobre un recipiente con guijarros y agua para aumentar la humedad ambiente a su alrededor.


Cuando las hojas se ponen amarillas, debe colocarla en un sitio más cálido, puede ser que haya cogido frío, esto puede ocurrir sobre todo en invierno. Hasta que se recupere, no la riegue.


Kentia.















Kentia (Howea forsteriana)




La Kentia, es una variedad de palmera de interior que está muy extendida, junto con las Chamadoreas y las Arecas, por lo sencillo de sus cuidados.
Procedente de Australia, son las reinas de nuestros salones por lo exótico de sus hojas arqueadas.
Como a todas las plantas, le gusta la luz, aunque se puede tener en lugares con escasa luminosidad, pero si se puede colocar cerca de una ventana, o en algún punto que tenga bastante luz, nuestra palmera estará más fuerte y vigorosa. Su crecimiento es lento.
No se debe de colocar en lugares donde exista corriente, ni cerca de una fuente de calor (calefacción). Otro punto a evitar es colocarla en una zona de paso, pues con el roce las puntas se irán estropeando, de la misma manera que si la colocamos en una esquina, que no roce las paredes. Hay que dejarla "a sus anchas"...
En cuanto al riego, en verano se recomienda 2 veces por semana y en invierno 2 veces al mes.
Evita el encharcamiento, observa que el agua no se quede acumulada en el fondo. En verano no dejes que se le seque el cepellón. Si las puntas se ponen amarillas, es posible que esté pasando sed.
A la hora del trasplante, hay gente que no le quita la maceta que ya tiene, para que no se le rompa el cepellón. Simplemente se le rompe la maceta por debajo, y se pone en la nueva maceta, agregándole sustrato nuevo.
Las puntas marrones indican que el ambiente es demasiado seco. Es recomendable pulverizar las hojas, ya que es una planta "deshumificadora" por así decirlo, le gustan los ambientes húmedos.
La cochinilla, la araña roja y los trips, son las plagas que suelen atacar a nuestra Kentia.












Insecto Cochinilla en la planta del Nopal.












Los "Trips" clavan un pico en las hojas y se alimentan de su savia, dejando unas manchitas blancas rodeadas de otras negras, que son sus excrementos.











Araña roja.

viernes, 24 de junio de 2011

Orquídeas.


















Phalaenopsis



Las orquídeas son unas plantas muy llamativas gracias a lo espectacular de sus extrañas y exóticas flores. Siempre pensé que su cultivo sería muy complicado... para nada.
La palabra orquídea deriva del griego (orchis = testículo), vocablo que se encontró por primera vez en los manuscritos de la obra De causis plantarum del filósofo griego Teofrastro y que datan aproximadamente del año 375 antes de Cristo. Esté vocablo hace referencia a la forma de los tubérculos de las especies del género Orchis orquídeas de hábito terrestre cuyos tubérculos dobles parecen testículos.
Ya en la antigüedad, eran conocidas y apreciadas.
Llegan aproximadamente a Europa en el año 1731. La mayoría, se morían durante el viaje al viejo mundo. Se obtuvo la primera floración en el jardín Botánico de Chelsea. A partir de ese momento, las clases más adineradas que se preciaran, casi tenían como deber el disponer de un orquideario.
Durante años se esquilmaron los bosques americanos en busca de ellas, llegando algunas especies a estar en peligro de extinción.
Hay sobre 20.000 especies, divididas en 800 familias. Su distribución va desde el Círculo polar ártico hasta Tierra del fuego y las islas al sur de Australia.

Las orquídeas se pueden clasificar en tres grupos:
  • Epifitas
  • Semi-terrestres
  • Terrestres
Las orquídeas epifitas, son las que cuelgan de árboles o arbustos. Quizás son las más vistosas y fáciles de encontrar a la venta. Proceden de zonas tropicales y no son parásitas. Obtienen el agua de la humedad del aire a través de sus raíces aéreas.

Las orquídeas semi-terrestres crecen sobre un capa de hojas en descomposición en el suelo o sobre piedras recubiertas de musgo. Algunas variedades serían: Paphiopedilum, Phragmipedium, Selenipedium y Cypripedium.

Nos quedan las orquídeas terrestres, son las que tienen sus raíces en la tierra.

Estás variedades tropicales, son relativamente fáciles de conseguir:













Cattleya















Cymbidium

















Dendrobium














Epidendrum
















Miltonia
















Oncidium










Paphiopedilum

















Vanda



Se deben ubicar en lugares muy luminosos. La falta de floración muchas veces se debe a la falta de luz.
Un buen lugar donde colocarlas sería cerca de una ventana, a ser posible orientada al sur. En primavera y verano, se deben de proteger de los rayos de sol directos con unos visillos o cortinas.
Para su floración, muchas de ellas necesitan una diferencia de temperaturas con un contraste de frío calor, entre el día y la noche (apróximadamente una diferencia de 10 grados).
Prácticamente a todas las orquídeas les gusta la humedad ambiental. Hay que tener en cuenta el aire seco que se puede crear por la calefacción en las viviendas.
Se pueden utilizar los siguientes trucos para aumentar la humedad a su alrededor:
  • Poner las macetas sobre una bandeja con gravas o guijarros mojados pero sin que el tiesto esté en contacto con agua.

  • Colocar recipientes con agua cerca de las plantas.

  • Situar las plantas juntas para que se cree un micro-clima húmedo.

  • Pulverizar con agua blanda, por ejemplo, de lluvia o descalcificada, pero no a las flores porque se estropearían.

No le agradan los ambientes cargados, es mejor que estén en sitios ventilados, ya que la
planta se puede refrescar al bajar su temperatura. También la ventilación ayudara renovar el oxígeno y el dióxido de carbono del lugar y ayuda a prevenir el ataque de hongos y bacterias al disminuir la humedad.

O sea, que es conveniente airear diariamente el emplazamiento, pero eso sí, evitando las corrientes de aire frío que provocan la caída de los capullos.

La frecuencia del riego dependerá, a parte de la especie de orquídea, de muchos otros factores como el tipo de sustrato, la temperatura, la luz, la ventilación, etc. Por ejemplo, cuanta más luz y mayor temperatura, mayor riego.

Es muy importante, no regar con agua que tenga exceso de sales o cal. El cloro que se utiliza para purificar el agua de consumo, en principio no les perjudica.

Existen en el mercado abonos específicos para orquídeas que dan muy buenos resultados, aunque también podemos utilizar algún tipo de abono universal que ya utilicemos para el resto de nuestras plantas, aunque en la mitad de la dosis que nos indique el fabricante del abono. El exceso de abono podría estropear, e incluso matar nuestras orquídeas.

El sustrato a los 2 ó 3 años pierde sus cualidades, se compacta reteniendo demasiada agua y acumulando sales de los fertilizantes. Si el riego y el abonado han sido altos, se deteriora en sólo 1 año. Así que, hay que lo ideal es renovarlo haciendo un trasplante cada 1 ó 2 años.

Los sustratos de orquídeas, suelen ser una mezcla formada por cortezas trituradas con musgo en una proporción del 70% y 30% respectivamente. En el mercado se encuentran sustratos preparados para orquídeas.

Reutiliza la misma maceta que tenía, se trata únicamente de renovar el sustrato. En una maceta grande no florecerá hasta que pasen 3 ó 4 años. Recuerda que las orquídeas son felices en tiestos pequeños. Se deberá elegir una maceta mayor, si la orquídea ha crecido mucho.

Las macetas para orquídeas (especialmente para las epifitas) suelen ser transparentes, para que les llegue la luz a las raíces. El mejor momento para el trasplante es el invierno, y como mucho principio de primavera, que es cuando comienza su período de mayor actividad.

Si las raíces están en mal estado, desmenuza el cepellón de sustrato, corta las raíces estropeadas o que estén podridas, y traslada a una maceta igual ó más pequeña, rellenando con sustrato nuevo.

Al acabar la época de floración, se debe de cortar por la base las varas de las flores. Si no se cortan, se fuerza la planta a que produzca otra de nuevo, lo que se traducirá en unas flores más pequeñas y posiblemente, se produzca el agotamiento de la planta.

A la hora de elegir tu orquídea, debes fijarte en que la planta este vigorosa y fuerte, que no tengan hojas amarillas o que tengan manchas en ellas.

Un buen consejo es que cada nueva planta que llegue a casa, pase por una "cuarentena", por posibles enfermedades o plagas. Se debería de aplicar a todas las plantas. Es una manera de curarnos en salud.

Pasa un pañito humedecido de vez en cuando por las hojas para quitar el polvo, de esta manera las ayudamos a que puedan respirar. También se pueden pulverizar las hojas (nunca las flores, se pudren) con agua baja en sales y en cal.

Posibles trastornos de nuestras orquídeas:

Luz insuficiente: provoca falta de floración, poco crecimiento, tallos que se caen, hojas de un verde muy oscuro.
Quemaduras por el sol: hojas amarillas o secas.

Exceso de riego: se pudren las raíces. Saca la planta del tiesto, corta las raíces podridas (negras y blandas), lava y desinfecta el tiesto y cambiar el sustrato por otro nuevo.
Mal drenaje ó sustrato compactado por estar viejo: el resultado es el mismo que antes, se pudren las raíces. Asegura que el agujero de drenaje inferior no está obstruido y cambia el sustrato cada 1 ó 2 años haciendo un trasplante.

Exceso de fertilizantes: puntas secas.

De manera ocasional, la planta puede perder sus hojas, es algo normal en la planta.


martes, 21 de junio de 2011

Plantas aromáticas, culinarias y medicinales.

Este tipo de plantas son prácticas y útiles, ya que a la vez que se pueden utilizar, bien sea en la cocina, para aromatizar o como remedio medicinal, también podemos disfrutar de su belleza decorando un hueco en casa o en el jardín.
Si las vamos a tener en casa, por ejemplo en la cocina, se deben de colocar en sitio muy luminoso, y lejos de una fuente de calor.
Lo ideal sería colocarlas en el alféizar de la ventana, pero sin que les de el sol de manera directa.
No debemos excedernos en el riego, aunque algunas como el perejil, el hierbahuerto o la menta, son mas "golosas" con el agua.














Perejil


Las aromáticas
, van desde árboles, arbustos y lo que comúnmente conocemos por hierbas aromáticas. En las hojas y en las flores almacenan aceites esenciales, que al contacto con el aire producen un perfume de mayor o menor intensidad.

Como hierbas aromáticas, las más conocidas serían:
  • Lavanda
  • Albahaca
  • Hierbahuerto
  • Perejil
  • Cilantro
  • Menta
  • Oregano
  • Tomillo
  • Salvia
  • Melisa
  • Mejorana
  • etc.












Romero



Arbustos aromáticos
:

  • Romero
  • Laurel
  • Curry
  • Rosal
  • Callistemo
  • Viburnum
  • Pitosporo
  • Dama de noche
  • Jazmín (trepadora)
  • Glicinia (trepadora)
  • etc.











Naranjo


Nos quedan los árboles aromáticos y algunas coníferas que tienen un agradable aroma:

  • Naranjo
  • Limonero
  • Mimosa
  • Ciprés (conífera)
  • Pino (conífera)
  • etc.




Bienvenid@s!









Tras muchos años trabajando en el mundo de las plantas, hemos decidido crear un blog en el que poder asesorarle sobre el cuidado de las mismas .Vamos a tratar los temas de una manera sencilla y sin explicaciones complicadas. De está manera, esperamos poder enseñarles nuevas cosas sobre este "hobby" tan bonito y relajante como es el cuidado de nuestras plantas. No dude en consultar las posibles dudas que le puedan surgir. Intentaremos ayudarle.
Gracias por pasar por nuestro blog.